Nada podría expresar mejor la situación educacional que vivimos que la foto que acá les presento.
Para contextualizar un poco es necesario acudir a la Historia. Durante la mayoría del siglo XX en Chile y el mundo, el Estado había sido uno de los entes fundamentales en la vida de las personas, en consecuencia estábamos en presencia de un Estado llamado Keynesiano, desarrollista, benefactor, social, etc., el cual estaba encargado de velar y asegurar la protección social, es decir, derechos a la sanidad, la vivienda, la educación, servicios sociales, pensiones de jubilación, y protecciones laborales. De forma sintética, el Estado era interventor, regulador y multifuncional, preocupándose en primera instancia de su propio pueblo. Lamentablemente con la imposición violenta del regimen militar chileno y la influencia de la potencia capitalista estadounidense, Chile se convierte en un Estado Neoliberal débilmente regulador, cuyo objetivo es financiar la demanda por educación pero no responsabilizarse por las reales necesidades educativas de la población, entre otras cosas. Se pasó a de un Estado Docente preocupado por este derecho a educarse a uno subsidiario que complementa la acción de los privados, que a pesar de gobiernos socialistas, sigue vigente en nuestro país.
Retomando la imágen, de forma analítica se puede observar la función que cumple la educación en nuestros días, un simple método de reproducción del sistema imperante que nos obliga a comprar la enseñanza, a comprar el aprendizaje y a comprar algo que antes era un derecho. Los gobernantes quieren que todos nos desenvolvamos en función de los requerimientos económicos del Capitalismo, y los que no sirven tirarlos a la basura, ¿porqué razón? porque no tienen como pagarla.
En estricto rigor, la legislación chilena respecto de la educación se manifiesta con la Ley Orgánica Constitucional de Enseñanza (LOCE), firmada por el iniciador de este sistema capitalista en Chile -A. Pinochet-, quien llevó a la educación y otras cosas más al mercado, otorgando a los privados y empresarios la facultad de negociar la enseñanza de nuestros niños, jóvenes y adultos, privilegiando siempre a los que poseen más dinero.
Diez y Seis años pasaron para que el gobierno de turno de la concertación se diera cuenta, o más bien reaccionara ante las movilizaciones en contra del lucro en la educación. Sínicamente plantea a la Ley General de Educación (LGE) como la solución ante las políticas pinochetistas, que un día rechazaban pero que sin duda se mantienen bajo otros nombres. Según dice el oficialismo, esta nueva ley da un vuelco a la LOCE. Sin embargo entre sus puntos esenciales plantea "Garantizar la libertad de enseñanza" añadiendo:"fortalecer el rol fiscalizador del Estado" . Evidentemente, esto no es otra cosa que la continuación de las leyes del tirano, ya que mantiene el lucro y la segregación social que produce esta libertad de enseñanza. "Cambiar para Permanecer"
En pocas palabras lo que se quiere es que los padre deben comprar la mercancía educación para poder asegurar de alguna forma el futuro de sus hijos, por su parte el estado, deberá proteger aquel derecho desvirtuado y preocuparse que el mercado funcione bien. Con la carga en las familias, la educación de “calidad” solo se dará en colegios privados donde la condición socioeconómica de sus alumnos equivaldrá a un estatus elevado. Finalmente se puede decir que la desigualdad y la mercantilización de este preciado derecho ahora como mercancía están consagradas.
La educación es un derecho y debe estar al servicio de las clases pobres y trabajadoras. Somos estudiantes y no clientes. No a la mercantilizacion de la educación.
Es solo un análisis somero ante la diversidad de causas y efectos de las políticas educacionales.
Saludos Fraternos
Skatito
Para contextualizar un poco es necesario acudir a la Historia. Durante la mayoría del siglo XX en Chile y el mundo, el Estado había sido uno de los entes fundamentales en la vida de las personas, en consecuencia estábamos en presencia de un Estado llamado Keynesiano, desarrollista, benefactor, social, etc., el cual estaba encargado de velar y asegurar la protección social, es decir, derechos a la sanidad, la vivienda, la educación, servicios sociales, pensiones de jubilación, y protecciones laborales. De forma sintética, el Estado era interventor, regulador y multifuncional, preocupándose en primera instancia de su propio pueblo. Lamentablemente con la imposición violenta del regimen militar chileno y la influencia de la potencia capitalista estadounidense, Chile se convierte en un Estado Neoliberal débilmente regulador, cuyo objetivo es financiar la demanda por educación pero no responsabilizarse por las reales necesidades educativas de la población, entre otras cosas. Se pasó a de un Estado Docente preocupado por este derecho a educarse a uno subsidiario que complementa la acción de los privados, que a pesar de gobiernos socialistas, sigue vigente en nuestro país.
Retomando la imágen, de forma analítica se puede observar la función que cumple la educación en nuestros días, un simple método de reproducción del sistema imperante que nos obliga a comprar la enseñanza, a comprar el aprendizaje y a comprar algo que antes era un derecho. Los gobernantes quieren que todos nos desenvolvamos en función de los requerimientos económicos del Capitalismo, y los que no sirven tirarlos a la basura, ¿porqué razón? porque no tienen como pagarla.
En estricto rigor, la legislación chilena respecto de la educación se manifiesta con la Ley Orgánica Constitucional de Enseñanza (LOCE), firmada por el iniciador de este sistema capitalista en Chile -A. Pinochet-, quien llevó a la educación y otras cosas más al mercado, otorgando a los privados y empresarios la facultad de negociar la enseñanza de nuestros niños, jóvenes y adultos, privilegiando siempre a los que poseen más dinero.
Diez y Seis años pasaron para que el gobierno de turno de la concertación se diera cuenta, o más bien reaccionara ante las movilizaciones en contra del lucro en la educación. Sínicamente plantea a la Ley General de Educación (LGE) como la solución ante las políticas pinochetistas, que un día rechazaban pero que sin duda se mantienen bajo otros nombres. Según dice el oficialismo, esta nueva ley da un vuelco a la LOCE. Sin embargo entre sus puntos esenciales plantea "Garantizar la libertad de enseñanza" añadiendo:"fortalecer el rol fiscalizador del Estado" . Evidentemente, esto no es otra cosa que la continuación de las leyes del tirano, ya que mantiene el lucro y la segregación social que produce esta libertad de enseñanza. "Cambiar para Permanecer"
En pocas palabras lo que se quiere es que los padre deben comprar la mercancía educación para poder asegurar de alguna forma el futuro de sus hijos, por su parte el estado, deberá proteger aquel derecho desvirtuado y preocuparse que el mercado funcione bien. Con la carga en las familias, la educación de “calidad” solo se dará en colegios privados donde la condición socioeconómica de sus alumnos equivaldrá a un estatus elevado. Finalmente se puede decir que la desigualdad y la mercantilización de este preciado derecho ahora como mercancía están consagradas.
La educación es un derecho y debe estar al servicio de las clases pobres y trabajadoras. Somos estudiantes y no clientes. No a la mercantilizacion de la educación.
Es solo un análisis somero ante la diversidad de causas y efectos de las políticas educacionales.
Saludos Fraternos
Skatito