sábado, 21 de junio de 2008

La Teología de la Liberación

Los años posteriores a la Revolución Cubana (1959), dan al continente la oportunidad al resto de los países de alzar las demandas sociales que sufrían la gran mayoría de los latinoamericanos a raíz del sistema capitalista. En este contexto surge la Teología de la Liberación, llámese reflexión, tesis, movimiento, etc., impulsada por teólogos y filósofos como el brasileño Leonardo Boff (1938), el peruano Gustavo Gutiérrez (1928) o el suizo Hans Kung (1928). En esencia, la Teología de la Liberación se manifiesta como una práctica que mezcla el cristianismo y las amplias ideas marxistas. Se plantea que la liberación o salvación de las personas no sólo es en el sentido cristiano, sino que también en un sentido político, económico y social. Si bien el Marxismo sostiene un carácter ateo fundamentado en su materialismo dialéctico -pues según esto, no existe nada eterno, todo esta en permanente cambio y dinamismo- , los principales referentes de este movimiento cristiano parten de una base netamente bíblica-evangélica, utilizando al Marxismo como un método y una visión crítica del mundo que permite clarificar la opresión que el capitalismo hace en desmedro de las masas populares, los trabajadores y la gente pobre, más que utilizar la ortodoxia de esta ideología.

El hecho de la explotación de las masas populares saltaba a la vista en los cinturones de miseria urbanos, en los campesinos a los que merodeaba continuamente la miseria. Estas experiencia y los estudios sociales sobre el por qué de esta situación de dependencia se difundieron y sacudieron la conciencia cristiana de muchos buenos pastores. Una nueva conciencia eclesial empezó a tomar forma a partir del modo nuevo de vivir la fe de aquellos que estaban comprometidos con los pobres y su liberación

(R. Muñoz, Nueva conciencia de la Iglesia en América latina, Salamanca, 1974.)

En términos reducidos, históricamente la Teología de la Liberación nace en la década de los 60' a partir del Concilio Vaticano II, callada posteriormente por el entonces cardenal Ratzinger (hoy papa) que da cuenta como la Iglesia Católica funciona a favor de intereses propios y bajo un sistema de censura que niega cualquier cosa que la desprestigie. Sin emabrgo es impulsada por el ya fallecido papa Juan Pablo II quien dijo que es "conveniente y necesaria". En la actualidad, es reprimida y tratada de inoperante o fuera de contexto, debido a los cambios sociales que experimentó el continente.

Entre los principios más sólidos que la Teología de la Liberación sostiene, es la condición de la pobreza o ser pobre, pues la Iglesia Católica tiene como fundamentos el amor al prójimo y la salvación de los pobres. Pero es en este sentido que el movimiento cristiano profesa un cambio estructural de la sociedad, rechazando en parte el patriarcalismo o el asistencialismo, para aspirar al socialismo.
Como dato acorde a nuestro país, ciertos análisis hablan de que el Sacerdote Alberto hurtado quien se desenvolviera en la primera mitad del siglo pasado, se anticipó a la Teología, ya sea por su acción eclesiástica mayoritariamente social, como por los principios genéricos que profesaba respecto de la Iglesia de los pobres.

Con esto vemos, la utilidad y la vigencia de los estudios marxistas y las posibilidades que abren a la construcción de un mundo más justo, equitativo e igualitario. Uniendo los criterios reflexivos y críticos sin necesidad inmediata de cuestionar los cimientos dogmáticos que presentan ambas corrientes de pensamiento.

Pero como siempre, estas reducidas palabras son un un estímulo para que investiguemos y edifiquemos nuestro propio conocimiento sobre la Teología de la Liberación.

Saludos Fraternos

Skatito

sábado, 7 de junio de 2008

La Liberación desde otra perspectiva

La segunda mitad del siglo pasado, ofrece una variada gama de eventos, movimientos y organizaciones políticas de corte marxista para LatinoAmérica. Una de ellas es la Teología de la Liberación (década del 60') que en esencia hace compatible la política marxista con la religión cristiana. Dentro de ella es el sacerdote colombiano Camilo Torres Restrepo(1929-1966) uno de los principales representantes prácticos. Sin ahondar mucho en biografías, se puede decir que Camilo Torres comenzó su vida política con investigaciones sociológicas de la vida urbana en Colombia, escribiendo en un semanario llamado "Frente Unido" y terminando en las filas del Ejército de Liberación Nacional Colombiano (ELN)

De acuerdo a su experiencia católica, Camilo Torres, concebía al cristianismo como la creación de una sociedad justa e igualitaria, para lo cual era necesaria una revolución que despojara del poder a los ricos oligarcas colombianos y así pasar a una sociedad socialista. En estos planteamientos políticos, C. Torres pensaba que la revolución que diera el bienestar a las clases populares debía aglutinar a todas las personas y organizaciones pobres que se sintieran oprimidos, actuando así en contra del imperialismo estadounidense y la hegemonía oligárquica. Agregó que los cristianos tenían la posibilidad y deber de participar de esta transformación social: “el deber de todo cristiano es ser revolucionario, y el deber de todo revolucionario es hacer la revolución”.

Como ya se mencionó, la Teología de la Liberación, cuestionda actualmente por las autoridades católicas, fue el centro ideológico de la lucha de Camilo Torres, ya que sus postulados intentaban construir una sociedad nueva basada en el socialismo y el cristianismo, donde la justa repartición de las riquezas sea el eje primordial...“Los marxistas luchan por la nueva sociedad, y nosotros, los cristianos, deberíamos estar luchando a su lado”.

Sin duda su lucha política, ideológica, militar y guerrillera se basaba en directa relación con el pueblo. Acá les dejo un fragmento de su obra "Mensaje a la Oligarquía (1965)". Camilo Torres murió combatiendo en 1966 junto al ELN.

"Señores oligarcas, el Pueblo ya no les cree nada a ustedes. El Pueblo no quiere votar por ustedes. El Pueblo está harto y desesperado. El Pueblo no quiere ir a las elecciones que ustedes organicen. El Pueblo no quiere a Carlos ni Alberto Lleras ni a ninguno de ustedes. El Pueblo está sufriendo y resuelto a todo. El Pueblo sabe que ustedes también están resueltos a todo. Por eso les pido que sean realistas y que si quieren engañar al Pueblo con nuevas componendas políticas, no vayan a creer que el Pueblo les va a tener fe. Ustedes saben que la lucha irá hasta las últimas consecuencias. La experiencia ha sido tan amarga que el Pueblo ya está decidido a echar el todo por el todo. Desgraciadamente los oligarcas aislados, ciegos y orgullosos parecen no querer darse cuenta de que la revolución de las masas populares colombianas no parará ahora sino hasta lograr la conquista del poder para el Pueblo."

Con este pequeño atisbo de Camilo Torres y de la Teología de la Liberación (que será analizada en posteriores publicaciones), nos damos cuenta que la lucha por "otro mundo posible" se puede dar de diversos ámbitos de la vida, terminando en parte con el sesgo de la incompatibilidad de la religión en la política, sin necesariamente adentrarse en el cuestionamiento de los dogmas cristianos.

fuente: Archivos Marxistas de www.marxismo.org

Saludos Fraternos

Skatito